El conceptualismo se pregunta qué es el conceptualismo?
Flarf convierte la poesía hasta el 11.
El conceptualismo no se trata de otra cosa que no sea el conceptualismo.
Flarf es poesía. Es todo lo que no es poesía.
Flarf es el grupo más temido de la corte de los piratas espaciales. Como tal, sigue siendo un miembro de Moby Grape.
El conceptualismo es el ridículo de los tribunales, pero no es el dong de Elvis.
Conceptualismo se compone.
Flarf está compuesto.
El conceptualismo emplea una variedad de técnicas que comprometen y complican la cuestión de bla, bla, bla, bla ....
Flarf es un unicornio tuneado que monta otro unicornio tuneado y así hasta la eternidad.
El conceptualismo dice, demuestra tu amor, pero en cambio, no demuestra ninguno.
Flarf te da más amor de lo que puedas manejar.
Flarf es calle, es una expresiva híbrida de cisne oso hasta que se cuecen las almejas.
El conceptualismo es fetichista. El pene es Bilbo Bolsón.
Flarf te pretende.
El conceptualismo pretende en cambio ponerte en un estado en el que deseas estar, según ellos, fuera de “tu miseria”.
Flarf quiere ser aún más inconsistente.
Flarf mantiene una actitud colisionadora en demasía hacia el mundo en general.
El conceptualismo quiere que sepas que se ha leído a todo Lacan.
Flarf tiene un shock anafiláctico para cada situación. Se trata de los Spin Doctors o la interpretación untada sobre el bagel del contexto social, como cuando KenRussell prefiere filmar a un ser humano preniéndose fuego como si fuese la lactancia de un cetáceo. Por lo tanto, el sororato de sus fundamentos recaen principalmente en la promesa cónica de un dinosaurio alimentado con leche radiactivamente preparada con etanol, en el sentido de que el dinosaurio representado debe mantener una relación más o menos estable con el Adderall, con un alivio desmesurado para cada uno de nosotros al ahorrarnos el hecho de escribir una prosa tortuosa para intentar atribuirnos una autoridad intelectual institucionalmente forzada, igualmente equilibrada, preferentemente centrada, con el fin de enmarcar el conceptualismo como una función tanto relevante para las realidades fiduciarias del mundo del arte y el mercado de valores de los otros lectores del conceptualismo que aumentan el valor de las participaciones mediante más lectura a un precio mayor. El conceptualismo repite gestos que fueron vetados y digeridos hace cuarenta años en el mundo del arte y los muestra en el mundo de la poesía prácticamente sin cambios: se trata de un remake. La poesía está tan fuera de su alcance que ni siquiera se dan cuenta de ello. Es por ello que el conceptualismo realiza una jerigonza intelectual. Esa jerigonza intelectual, la podría identificar, el profesor de historia del arte.
Conceptualismo tiene una sóla respuesta, la cual es: ser aburrido sin ser diferente. A través de la implementación de múltiples estrategias que sirven para presentar escritores con textos supestamente desestabilizadores (existentes o fabricados) a través de refritos y lugares comunes con un despliegue retórico, el conceptualismo es neo-canadiense, aunque no parece que hayan leído lo suficiente a Dan Farrell, epistemológicamente preocupos con el tema en cuestión y la creación de instancias de Sandy Duncan, en otras palabras, la voluntad afirmativa hacia Sandy Duncan que se manifiesta en el hecho de Sandy Duncan en sí misma. En otras palabras, la creación de instancias en lo cual es el texto contraindicado conscientemente en el sentido de todo lo que ha hecho que el texto tenga sentido contextual para Sandy Duncan, la renderización inmaterial de cada materialidad proveneinte de la poesía. El texto contraindicado siendo el nuevo con-texto, con-, como he señalado en otro lugar, en el sentido de Sandy Duncan.
Flarf es la rabia por esteroide del Fortran: Leggo mi ego.
Conceptualismo es el Cancán en el espejo del baño, el discurso del afeitado.
Flarf es mafia en el sentido del tiroteo durante una caminata virtual con Guy Debord. Como tal, debe ser sans repression: Marie Osmond.
El conceptualismo es Lacaniano en el sentido del deseo a través de Jude Law por medio del petit déjeuner (desayuno). Como tal: Donny Osmond.
Conceptualismo, haciendo hincapié en las notas que están sobre la pared de la galería que explica punto por punto cómo se debe tomar el arte y cómo éste ha sido hecho, desactiva el pensamiento.
Flarf, al no proporcionar una coño de su madre nota que le diga lo que tiene que ser, activa al pensamiento.
Flarf juega al beso entre los primos (entre primo y pariente no hay carne que no entre). Utiliza el lenguaje de la gente cuando los poetas supuestamente parecen ser más listos que la gente. Flarf es siempre el primero en ver a otros grupos de poesía como oportunidades para orgías entre la Sra Buttersworth y los Jell-O, que es lo mismo que decir una orgía de miel y gelatina, y se queda hasta tarde para darle a la fiesta fiesta fiesta. Podría después desangrarse de una lesión en la cabeza, para probablemente sobrevivir. Sí, se prostituye - como se prostituyen los que quieren estar en el Madison Square Garden. Son los pitufos viendo Point Break (1991) mientras leen el Finnegans Wake de Joyce. No tienes otra opción, son lo máximo, ¿verdad? Y pueden jugar aún más sucio.
Flarf es el nuevo estilo, en el centro del escenario con el micrófono, y están creando el molde. Aquellos que escriben flarf escriben poesía, o, para usar su propio lenguaje: "Eres de las afueras - nosotros de la Capital, estás celoso porque te rasguñan la arepa. Poetas con movimientos son lo que son.. Te voy a robar a los poetas como me robé tu bicicleta ". A la larga, todos aquellos poetas conceptuales se convertirán al flarfismo.
Flarf es espontáneo. El conceptualismo es lo contrario. En este sentido, Flarf está haciendo que Chuck Woolery los vea ponerse a punto. Conceptualismo es morir de hambre.
Marjorie Perloff le gusta el conceptualismo.
Flarf convierte la poesía hasta el 11.
El conceptualismo no se trata de otra cosa que no sea el conceptualismo.
Flarf es poesía. Es todo lo que no es poesía.
Flarf es el grupo más temido de la corte de los piratas espaciales. Como tal, sigue siendo un miembro de Moby Grape.
El conceptualismo es el ridículo de los tribunales, pero no es el dong de Elvis.
Conceptualismo se compone.
Flarf está compuesto.
El conceptualismo emplea una variedad de técnicas que comprometen y complican la cuestión de bla, bla, bla, bla ....
Flarf es un unicornio tuneado que monta otro unicornio tuneado y así hasta la eternidad.
El conceptualismo dice, demuestra tu amor, pero en cambio, no demuestra ninguno.
Flarf te da más amor de lo que puedas manejar.
Flarf es calle, es una expresiva híbrida de cisne oso hasta que se cuecen las almejas.
El conceptualismo es fetichista. El pene es Bilbo Bolsón.
Flarf te pretende.
El conceptualismo pretende en cambio ponerte en un estado en el que deseas estar, según ellos, fuera de “tu miseria”.
Flarf quiere ser aún más inconsistente.
Flarf mantiene una actitud colisionadora en demasía hacia el mundo en general.
El conceptualismo quiere que sepas que se ha leído a todo Lacan.
Flarf tiene un shock anafiláctico para cada situación. Se trata de los Spin Doctors o la interpretación untada sobre el bagel del contexto social, como cuando KenRussell prefiere filmar a un ser humano preniéndose fuego como si fuese la lactancia de un cetáceo. Por lo tanto, el sororato de sus fundamentos recaen principalmente en la promesa cónica de un dinosaurio alimentado con leche radiactivamente preparada con etanol, en el sentido de que el dinosaurio representado debe mantener una relación más o menos estable con el Adderall, con un alivio desmesurado para cada uno de nosotros al ahorrarnos el hecho de escribir una prosa tortuosa para intentar atribuirnos una autoridad intelectual institucionalmente forzada, igualmente equilibrada, preferentemente centrada, con el fin de enmarcar el conceptualismo como una función tanto relevante para las realidades fiduciarias del mundo del arte y el mercado de valores de los otros lectores del conceptualismo que aumentan el valor de las participaciones mediante más lectura a un precio mayor. El conceptualismo repite gestos que fueron vetados y digeridos hace cuarenta años en el mundo del arte y los muestra en el mundo de la poesía prácticamente sin cambios: se trata de un remake. La poesía está tan fuera de su alcance que ni siquiera se dan cuenta de ello. Es por ello que el conceptualismo realiza una jerigonza intelectual. Esa jerigonza intelectual, la podría identificar, el profesor de historia del arte.
Conceptualismo tiene una sóla respuesta, la cual es: ser aburrido sin ser diferente. A través de la implementación de múltiples estrategias que sirven para presentar escritores con textos supestamente desestabilizadores (existentes o fabricados) a través de refritos y lugares comunes con un despliegue retórico, el conceptualismo es neo-canadiense, aunque no parece que hayan leído lo suficiente a Dan Farrell, epistemológicamente preocupos con el tema en cuestión y la creación de instancias de Sandy Duncan, en otras palabras, la voluntad afirmativa hacia Sandy Duncan que se manifiesta en el hecho de Sandy Duncan en sí misma. En otras palabras, la creación de instancias en lo cual es el texto contraindicado conscientemente en el sentido de todo lo que ha hecho que el texto tenga sentido contextual para Sandy Duncan, la renderización inmaterial de cada materialidad proveneinte de la poesía. El texto contraindicado siendo el nuevo con-texto, con-, como he señalado en otro lugar, en el sentido de Sandy Duncan.
Flarf es la rabia por esteroide del Fortran: Leggo mi ego.
Conceptualismo es el Cancán en el espejo del baño, el discurso del afeitado.
Flarf es mafia en el sentido del tiroteo durante una caminata virtual con Guy Debord. Como tal, debe ser sans repression: Marie Osmond.
El conceptualismo es Lacaniano en el sentido del deseo a través de Jude Law por medio del petit déjeuner (desayuno). Como tal: Donny Osmond.
Conceptualismo, haciendo hincapié en las notas que están sobre la pared de la galería que explica punto por punto cómo se debe tomar el arte y cómo éste ha sido hecho, desactiva el pensamiento.
Flarf, al no proporcionar una coño de su madre nota que le diga lo que tiene que ser, activa al pensamiento.
Flarf juega al beso entre los primos (entre primo y pariente no hay carne que no entre). Utiliza el lenguaje de la gente cuando los poetas supuestamente parecen ser más listos que la gente. Flarf es siempre el primero en ver a otros grupos de poesía como oportunidades para orgías entre la Sra Buttersworth y los Jell-O, que es lo mismo que decir una orgía de miel y gelatina, y se queda hasta tarde para darle a la fiesta fiesta fiesta. Podría después desangrarse de una lesión en la cabeza, para probablemente sobrevivir. Sí, se prostituye - como se prostituyen los que quieren estar en el Madison Square Garden. Son los pitufos viendo Point Break (1991) mientras leen el Finnegans Wake de Joyce. No tienes otra opción, son lo máximo, ¿verdad? Y pueden jugar aún más sucio.
Flarf es el nuevo estilo, en el centro del escenario con el micrófono, y están creando el molde. Aquellos que escriben flarf escriben poesía, o, para usar su propio lenguaje: "Eres de las afueras - nosotros de la Capital, estás celoso porque te rasguñan la arepa. Poetas con movimientos son lo que son.. Te voy a robar a los poetas como me robé tu bicicleta ". A la larga, todos aquellos poetas conceptuales se convertirán al flarfismo.
Flarf es espontáneo. El conceptualismo es lo contrario. En este sentido, Flarf está haciendo que Chuck Woolery los vea ponerse a punto. Conceptualismo es morir de hambre.
Marjorie Perloff le gusta el conceptualismo.
Marjorie Perloff no le gusta el flarf.
El mejor conceptualismo es legible y exitoso.
Flarf falla en hacer lo que se propone inicialmente, a ser malo. Flarf es bueeeeeeeeeeeeeeno.
Poesía es conceptualismo.
Flarf es vida.
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Traducción: @nanolaguna
